En la última jornada de liga el FC Barcelona consiguió una sufrida y agónica victoria en Mestalla (2-3), gracias a un gol de Messi tras acertar desde el punto de penalti ya en el tiempo añadido. El partido tuvo de todo, desde jugadas polémicas y decisiones arbitrales controvertidas hasta lanzamiento de objetos contra jugadores del Barça.
Pero, como por desgracia no podía ser de otra, la caverna conectó todos sus altavoces mediáticos para desprestigiar al victoria del Barça, deformando la realidad de lo que se vivió en Mestalla.
Sin duda Undiano Mallenco no tuvo su mejor tarde; pero el Valencia no puede ocultarse en su actuación arbitral para justificar una justa derrota. Lo increíble es que un árbitro con la experiencia de Undiano no supiese que un partido caliente como un Valencia-Barça hay que atarlo y controlarlo desde el pitido inicial. Y así, dejar sin amonestar al comienzo a Enzo Pérez tras la salvaje tijera que provocó la salida del campo de Iniesta en camilla fue entendido por los jugadores valencianistas como que se podía repartir cera con total impunidad. Y eso fue justo lo que hizo pocos minutos después Mario Suárez cuando le metió una plancha a André Gomes, que no acabó en la enfermería de milagro. Si el árbitro se hubiese dejado de milongas y en el minuto 20 el Valencia se hubiese quedado con nueve jugadores, se habría acabado esta pamema.
Curiosamente los mismos que desde la grada aplaudían la dureza de los suyos, se pusieron estupendos para pedir la expulsión de Busquets por dos agarrones de la señorita Pepis. Por cierto, agarrones idénticos al que protagonizó al comienzo del partido Parejo sobre Iniesta que quedó sin sanción. Vamos, de locos, se armó la mundial por enganchar una camiseta, al mismo tiempo que se jaleaba a unos guadañeros que convirtieron Mestalla en un campo de minas.
Además de eso, se pidieron dos penaltis: uno en el área del Barça, con una caída de Rodrigo que se asustó al ver a Umtiti a su lado y le dio una lipotimia, y otro en una barrida de Enzo – siempre Enzo – ante Messi que se llevó por delante el balón y al delantero azulgrana, justificándose con el falaz y tontorrón argumento de “tocó balón”, como si eso fuese la panacea.
Y para que no faltase de nada, polémica en dos goles concedidos – el primero del Barça y el segundo del Valencia -, en los que se pidió que se anulasen por fuera de juego posicional. Jugadas idénticas y decisiones idénticas de Undiano. Por cierto, antes de opinar sobre ambas jugadas es recomendable hacerse una revisión oftalmológica por si alguno ve la paja en el ojo ajeno, pero no la viga en el propio.
La traca final estalló con el penalti pitado en el tiempo añadido, penalti como una catedral cometido por Abdennour, que entró como un elefante en una cacharrería en una jugada dentro de su área, derribando a Luis Suárez cuando se disponía a fusilar la portería valencianista. En ese momento Diego Alves ejerció de mamarracho, impidiendo el lanzamiento por parte de Messi, al que incordió todo lo que pudo con gestitos, bailecitos y comiéndole la oreja, ante la permisividad del árbitro. El crack argentino no se arrugó y clavó el disparo, provocando la locura entre sus compañeros, que tuvieron que aplazar la celebración del gol de la victoria para mejor ocasión al producirse desde la grada el lanzamiento de una botella. A continuación Enzo – siempre Enzo – se encaró con Neymar para completar su hat-trick particular: lesionó a Iniesta, cometió penalti sobre Messi y quiso agredir a Neymar, todo ello luciendo el brazalete de capitán. Desde luego ni Enzo – siempre Enzo – podía llegar a más ni el Valencia CF a menos.
Destacar que también Alcácer vio como objeto volador lanzado desde la grada impactaba contra él, supongo que como señal de agradecimiento por haber dejado en las arcas valencianistas 30 millones de euros. También es cierto que Marca ya se había encargado de poner al jugador en el punto de mira con un repugnante titular en la previa del partido.
En estos momento, se desconoce si el Valencia CF, que en boca de su director deportivo acusó al árbitro de haber influido en el resultado, ya ha identificado y puesto a disposición policial a los dos energúmenos que el pasado sábado demostraron que les gusta más el tiro al blanco que el fútbol y, en el caso de que sean socios, ya han sido expulsados.
Seguro que durante esta semana la caverna y sus altavoces mediáticos seguirá dando la matraca MINTIENDO sobre lo que ocurrió en Mestalla, defendiendo a los agresores y culpabilizando a las víctimas de los incidentes. Por ejemplo, en el programa Herrera en Cope, su director Carlos Herrera y un tal Alcalá – conocido en la profesión por haber sido condenado por realizar falsas acusaciones de dopaje contra el FC Barcelona – relataron el bochornoso lanzamiento de la botella entre jijís y jajás… Es que menuda risa que a un futbolista le den un botellazo desde la grada, ¿verdad botarates? Después el día que ocurra una desgracia se harán los dignos y se echarán las manos a la cabeza… panda de hipócritas. @Bajarlaalpasto
no se puede estar más acertado en todo el escrito como lo estás tú, mi enhorabuena por el artículo, ya pensé que me estaba volviendo loco y que era el único que pensaba ésto del partido del sabado
Gracias por participar con tu comentario, Raúl. El tratamiento informativo que le están dando es malévolo porque claro que Undiano se equivocó, pero no perjudicó al Valencia, ¡ni mucho menos!
Y lo que más me molesta es que ya nadie habla del salvaje que lanzó una botella, ¿se va a ir de rositas? Me parece increíble.
Un saludo 😉
Yo añadiría que el primer gol del Valencia también parte de fuera de juego. Pero esa jugada también pasa desapercibida para la central lechera y el resto de televisiones.
El inicio de esa jugada creo que ni lo han repetido.
Gracias por la info 😉
Por no hablar de lo que se adelanta Alves en el penalty, si buscais en you-tube vereix que todos los penaltys que ha parado està 1 m. adelantado cuando chuta el contrario i los arbitros ni se enteran de que hay que repetir el lanzamiento
Tienes toda la razón. Y a mayores el show que montó retrasando el lanzamiento y haciendo la mona delante de Messi.
Gracias por tu comentario, ¡saludos! 😉
Pingback: Al Comité de Competición: ¡vosotros sí que sois ridículos! | Bajarla al pasto