Todos los años, y dependiendo de cómo a cada equipo la vaya en la feria, escuchamos la cantinela de si la Copa del Rey a nadie le importa, si es un torneo menor, si no es copa que es chupito y demás lindezas por el estilo. En Bajarla al pasto nos declaramos defensores de esta competición y, aunque sea la tercera en importancia dentro del calendario, somos conscientes del prestigio que da disputar la final y, por supuesto ganarla. Al mismo tiempo somos partidarios de un cambio en el formato, con el convencimiento de que las eliminatorias a partido único serían un atractivo más para este histórico torneo.
Además este año, tanto el sorteo como la brillante participación de los favoritos, nos ofreció unos emparejamientos de cuartos de final en el que estaban ocho de los principales equipos de nuestra liga, con la única ausencia del Athletic, finalista copero de la edición anterior. Y así las eliminatorias de cuartos nos dejaron unos espectaculares enfrentamientos de semifinales, Real Madrid – F.C. Barcelona y Atlético de Madrid – Sevilla, que se disputarán, a doble vuelta, los días 30-31 de enero y 27 de febrero.
El Real Madrid – Barça es el clásico de los clásicos del fútbol español, y uno de los partidos que actualmente despierta más interés en todo el planeta fútbol. En él se dan cita los mejores jugadores del mundo y, por ello, está rodeado de una gran expectación, motivada por la gran rivalidad existente entre ambos equipos.
En principio, el equipo azulgrana se presenta como favorito, ya que está jugando y ganando la práctica totalidad de sus partidos con una facilidad pasmosa, y llega a esta cita con todas sus estrellas en plena forma. Por el otro lado, para el Madrid es la primera tabla de salvación de una temporada calamitosa, en la que acapara permanentemente las portadas de los medios de comunicación por motivos extradeportivos y no futbolísticos. Aunque se quiere vender como un duelo entre Cristiano y Messi, este partido es mucho más que eso y la clave la tendrá el rendimiento y el acierto de jugadores como Iniesta, Busquets, Özil o Benzema.
En la segunda semifinal se encuentran dos equipos para los que disputar la final sería un premio y ya no digamos para sus respectivas aficiones. Atendiendo a la trayectoria en la liga, el Atleti debería imponerse al equipo andaluz, pero seguro que la eliminatoria será muy igualada y que se resolverá en terreno sevillista, lo que hace que se iguale todavía más. Si el Sevilla marca en el Calderón habrá dado un paso importante, mientras el cuadro colchonero dependerá del acierto de sus delanteros secundarios, ante las dudas que plantea la recuperación de Falcao.
En Bajarla al pasto pronosticamos que la gran final del día 18 de mayo la disputarán el Barça y el Sevilla en el Santiago Bernabéu… si es que a Florentino Pérez no se le ocurre volver a arreglar los retretes del estadio justo ese día.