Bulos, rumores e intuiciones

@aleguimaD
Siguen las dudas en el PSG; tras disputarse ya tres jornadas que se ha saldado con tres tristes empates, el club parisino pretende dar un golpe de efecto y conseguir ya para esta temporada el fichaje del brasileño Leandro Damiao, del que se esperaría, además de goles, que espabilase a un apático Ibrahimovic.

@alex_d_b
El Milan tampoco ha iniciado bien la competición y anda a la búsqueda de jugadores jóvenes con los que poner en marcha un nuevo proyecto, tras haber jubilado a la vieja guardia. Así, y tras conseguir la cesión de Bojan, el nuevo objetivo es Ganso, quien podría abandonar el Santos para adquirir experiencia en Europa y de esta forma hacerse con el timón de la selección canarinha.

 @aleguimaD
En San Mamés, tras las prácticamente salidas seguras de Javi Martínez y Llorente, están como locos por atar a De Marcos, Muniaín y a Iturraspe, porque se temen una segunda fuga masiva al final de esta temporada. Varios equipos de la Premier ya han adelantado que este año estarán muy atentos a la evolución de varios cachorros.

 @alex_d_b
Florentino está que echa las muelas con Mourinho. Después de estar todo el verano exigiendo el fichaje de Modric y, tras conseguirlo por un precio desorbitado y fuera de mercado, resulta que lo que quiere ahora el portugués es un lateral derecho. Pero no lo dudéis, el presidente volverá a pasar por el aro y soltará entre 10-12 millones para satisfacer el nuevo capricho de su técnico.

@aleguimaD
Pellegrini ha conseguido clasificar con todo merecimiento al Málaga para disputar la fase final de la Champions League, pero ya ha avisado que tiene una plantilla muy corta para afrontar dignamente todas las competiciones. En estos tres días seguro que se producirá más de una incorporación: Fontás está prácticamente asegurado y el club malacitano va a ir a por Granero, en la que sería una de las bombas del verano.

 @alex_d_b
Y, como todas las temporadas, atención a los últimos movimientos de Lendoiro en el Depor. Anda a la caza de un delantero y de un lateral, y parece que hará un último intento por conseguir que el gol en Riazor lleve el nombre de Ulloa. Para el lateral se busca a un veterano con oficio, y el mejor colocado es el getafense Mané.

De delanteros centro y otras mentiras…

Los españoles nos atrevemos a sentar cátedra sobre lo que sea, y como no podía ser de otra forma además de un político, un magistrado o un economista, todos llevamos dentro un seleccionador. Siendo así no es de extrañar los ríos de tinta y las horas de discusiones de “barra de bar” que han tenido lugar a lo largo de esta semana como consecuencia del estreno de nuestra Selección en la Eurocopa con empate ante Italia, y en especial de la alineación con “delantero centro mentiroso” con la que sorprendió Vicente del Bosque.Marqués de Del Bosque

Por supuesto si hubiésemos goleado a Italia (cosa que por cierto no hemos hecho nunca y no sé por qué parece que esperábamos) seguramente  estaríamos hablando del señor marqués como un auténtico “pitagorín” de la pizarra, un maestro que “sorprendió a la escuadra Azurra cuyos tres centrales no sabían a quién marcar”, o incluso soltaríamos alguna juanitada del estilo de “los delanteros no tienen que estar, tienen que aparecer”. Sin embargo, como el resultado no fue el saco de goles que nos habría gustado hemos optado por otra opción muy española: Atizarle.

Escuché a muchos criticar la falta de gol, y a varios periodistas decir que Del Bosque quiso jugar como Guardiola, pero que solo se puede jugar con delantero centro “mentiroso” cuando ese tipo es Messi, que mete más de 70 goles en una temporada. Yo sin embargo pienso que el esquema que sacó Don Vicente no se puede comparar con el del Pep Team, simplemente fue un nuevo invento que no salió tan bien como se esperaba (ojo, ni tampoco tan mal). El Barcelona juega sin ariete, cierto, pero con tres delanteros (4-3-3), mientras que el pasado domingo España saltó al campo con 6 centrocampistas y ningún delantero. Otra cosa sería que hubiese salido Cesc igualmente como punta pero flanqueado, por ejemplo, por Pedro y Navas como extremos… Entonces sí me parecería comparable a la idea implantada por Guardiola.

Del Bosque sorprendió con una alineación nueva, invención suya y no copiada de nadie: Sin delantero y sin abrir el campo con extremos, confiando en un centro del campo de una calidad inmejorable y la capacidad de estos “pequeños” para jugar entre líneas, permutar posiciones y sorprender desde atrás. Este es el primer punto.

Con esta idea entiendo que pretendía crear superioridad en el centro del campo y desconcertar a los centrales transalpinos. Que la idea no saliese del todo bien lo achaco más a cierta falta de chispa, de presionar más arriba y con más intensidad, de tener este esquema más ensayado y de que enfrente tuvimos a una Italia muy sólida. Pues bien, de estas carencias que señalo más que al seleccionador culpo a la LFP, que con su “brillante” diseño del calendario nos llevó a tener que jugar los partidos de preparación con futbolistas que ahora están viendo la Eurocopa por la tele sentados en su casa. Eso sí que es criticable.

Del Bosque levantando la Copa del Mundo

Y por supuesto no sé lo que esperábamos, si “La Roja” ha demostrado algo ha sido toque, control y posesión, no una espléndida capacidad goleadora. Levantamos la Copa del Mundo jugando bien, pero ganando los partidos por la mínima, y perdiendo en el estreno contra Suiza. Si a esto además le sumas que Villa, que no está, marcó todos los goles menos dos, no entiendo que nos llevaba a pensar que en el arranque contra la correosa Italia iba a haber una lluvia de tantos.

Fernando Torres ha marcado la “friolera” de 4 goles esta temporada, Negredo 14, y Llorente, que con 29 sí hizo una marca a la altura de un delantero de nivel, parece que ha llegado en muy mal físicamente a este torneo (lamentablemente, porque apuntaba a titular).

Vistos por tanto los escasos argumentos de nuestros artilleros no me parece mal que Del Bosque se decidiera a apostarlo todo por nuestros fuertes: El centro del campo, la posesión y la creatividad. Quizá no metiésemos 5 goles, pero si dominábamos el partido tarde o temprano alguno caería. Y no le faltó razón, porque Cesc, su falso punta, fue el autor de nuestro único tanto.

Cesc marca contra Italia

Además el seleccionador supo leer bien el encuentro y cuando se encontró más abierto metió a Jesús Navas para abrir el campo por la derecha y a Torres para entrar fresco y tirar desmarques. La pena fue que Torres no marcase una de sus tres claras ocasiones, porque entonces ahora no estaríamos con todo este debate. En cualquier caso no creo que tengan razón los que clamaban de forma ventajista “ves, con Torres estamos generando más ocasiones”. Así fue, pero porque salió cuando salió, dudo mucho que esa hubiera sido la tónica si hubiese empezado desde el minuto 1.

En definitiva, Del Bosque tiene crédito ganado a pulso, así que yo seguiré confiando en él. No es un drama empatar contra Italia en el estreno, es un buen resultado y las opciones de pasar primera de grupo están intactas.

Veremos qué hacen hoy contra Irlanda. Creo que esta vez sí ganarán con facilidad, ya que Irlanda me parece quizá la selección más floja de todo el campeonato, pero será muy interesante ver la alineación qué saca Don Vicente y cómo jugamos… Pase lo que pase, conociéndonos, alguna bufada caerá de todos modos.

La gran fiesta del fútbol: la final de la Copa del Rey

Aunque muchos, incluso desde altas instancias, intentaron boicotear la final de la Copa del Rey, Bajarla al pasto comprobó, porque estuvo presente en el Vicente Calderón, que allí se vivió la auténtica fiesta del fútbol.

A ella llegaron los dos equipos más galardonados con dicho trofeos con lo cual dicha final no podía tener dos mejores protagonistas. A lo largo de la historia es fácil comprobar la importancia y el respeto que tanto el Barça como el Athletic han demostrado por esta competición, y prueba de ello es que, a principio de cada temporada, es para ambos clubes uno de sus principales objetivos, porque reconocen, no como otros, el prestigio que da conseguir esta Copa.

La falsa polémica creada sobre los silbidos a la monarquía, a la bandera o a los símbolos de la nación española se vio empequeñecida ante el comportamiento ejemplar demostrado por las aficiones de los equipos que disputaron la gran final del fútbol español. Como estuvimos en el campo nadie nos va a contar lo que allí ocurrió: silbidos por alguna parte de los asistentes durante los segundos en los que sonó el himno, que no pasaría de ser una anécdota provocada por unos miles de maleducados e intransigentes, de no ser por la repercusión que tomó dicho comportamiento tras unas declaraciones irresponsables y fuera de lugar  protagonizadas por una persona llamada, por el cargo institucional que ocupa, a intentar apaciguar los ánimos y a preparar un recibimiento cordial a los miles de visitantes que se desplazaron a Madrid ese fin de semana.

Lo más curioso de esa actitud, es que el afán de protagonismo de dicho personaje, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, le llevó a ser nombrada como “la más maleducada del evento”, tras haber dejado plantado al mismísimo Príncipe de Asturias, quien, en un alarde de saber estar y de cumplir con sus responsabilidades, aguantó estoicamente los 10-15 segundos de silbidos y después disfrutó del espectáculo deportivo.

En el apartado estrictamente futbolístico, el Barça salió desde el primer minuto dispuesto a cerrar el partido y a regalarle a su entrenador, Pep Guardiola, su último título en el día de su despedida. Así, y antes de la primera media hora de partido, ya se habían puesto con un demoledor 3-0 a favor, que dejaba la final prácticamente sentenciada.

El Athletic, empujado por su afición, no entregó el partido, pero no fueron capaces de conseguir ese gol que les hubiera dado un poco de aliento. Impresionante el comportamiento de sus aficionados, que no pararon de animar hasta que el árbitro pitó el final, aunque desde muchos minutos antes ya sabían que el encuentro estaba decido.

Por parte del Barça, hay que destacar el gran partido de Piqué, el saber estar de Mascherano, el dominio de la situación de Xavi e Iniesta, el oportunismo de Pedro y la efectividad de un Messi que nunca falla cuando se trata de una final.

En el bando de los leones, lo más destacado fue que jamás se rindieron y pelearon hasta el último minuto, pero es difícil destacar a algún jugador, ya que mientras alguno parecía estar excesivamente cansando, otros dieron la sensación de estar superados por la trascendencia de un partido de esa importancia. No sabemos que pasará este verano en el mercado de fichajes, pero si son capaces de mantener la estructura del equipo, basada en Javi Martínez, Iturraspe, Herrera, Muniaín y Llorente, está claro que será habitual verles disputar muchas más finales.

Para que no quede ninguna duda sobre los cauces deportivos sobre los que discurrió esta gran final diremos que antes del partido, por la inmediaciones del estadio Vicente Calderón, ambas aficiones compartieron cánticos y cervezas es un clima festivo; durante el partido, cada uno animó a su equipo (había más bilbaínos que culés); y al finalizar los leones se quedaron a aplaudir deportivamente al campeón, mientras que fue emocionante escuchar a toda la grada blaugrana gritando “Athletic, Athetic…”.

La salida del estadio fue de lo más plácida y no se registró ni el más mínimo incidente, con lo que la gente del fútbol demostró mucha más madurez que alguno de nuestros políticos y algún presidente de club que se negó a prestar sus instalaciones en base a unos incidentes que supuestamente iban a suceder.

El fútbol español debe darle las gracias al Sr. Cerezo por la madurez e implicación que demostró cediendo su estadio, y a la ciudad de Madrid que, como siempre, acogió y organizó un evento de gran repercusión con una nota de sobresaliente; y deberá meter en cuarentena a personajes como Esperanza Aguirre y Florentino Pérez quienes con su irresponsabilidad calentaron a nivel mediático un evento que resultó ser, un año más, la gran fiesta del fútbol.