Chenoa pone la banda sonora en la despedida de Piqué y Busquets

«Cuando tú vas, yo vengo de allí; Cuando yo voy, tú todavía estás aquí.» –  Chenoa, cantante española.

El despropósito de partido que disputó el Barça en el Camp Nou frente al Inter, teniendo en juego la clasificación para los octavos de final de la Champions League, y que finalizó con el equipo culé prácticamente fuera de la competición, tendría que servir también como despedida de Piqué y Busquets. Y es que nada más patético que seguir retrasando lo inevitable, como es que dos de la grandes leyendas de la historia del club ya no están para rendir al máximo nivel y están arrastrando al equipo en su caída.

Resulta muy duro ver como dos de los buques-insignia del equipo que maravilló al planeta fútbol no han sido capaces de darse cuenta de que deberían haber dado un paso a un lado, después de haber participado en todos los desastres europeos de las últimas temporadas, en vez de agarrarse como garrapatas a unos contratos desorbitados, fuera de mercado y alejados tanto de la realidad económica de la institución como de la deportiva de los protagonistas.

Por ello, por el bien del club y del prestigio de los propios jugadores, urge que se busque una solución, la menos traumática para las dos partes, porque no se puede consentir que dos leyendas como Piqué y Busquets sigan protagonizando la ruina tanto económica como deportiva del FC Barcelona.

Sin duda me gustaría que su despedida hubiese sido en tiempo y forma, acorde con la categoría de ambos futbolistas y en consonancia con su participación en la época más gloriosa del club. Y que en una gran fiesta ante un Camp Nou entregado hubiese sonado ‘We Are de Champions’ o ‘Gonna Fly Now’. Pero no ha sido así y, lamentablemente, quedarán para el recuerdo varias escenas en las que, dos de los han sido los mejores del mundo en sus posiciones, parecen dos pollos sin cabeza perdiendo la posición, corriendo sin sentido e interpretando mal las jugadas.

De ahí que en sus últimas actuaciones no hayamos escuchado de fondo a Freddie Mercury ni la banda sonora de Rocky, y lo único que viene a nuestros oídos son los gorgoritos de Chenoa cuando interpreta ‘cuando yo voy, tú todavía estás aquí’, como metáfora cruel de lo que es llegar tarde a todos los balones. Y cuidado porque puede que lo siguiente que suene sea la ‘Balada para una despedida’, del tristón de José Luis Perales con su ‘hoy estando buscando la mejor manera de decirte adiós…’. @Bajarlaalpasto

Cuatro capitanes culés y un funeral

«La culpa ha sido mía, yo soy el único cabrón de esta historia…» – Hugh Grant en la película ‘Cuatro bodas y un funeral’.

Uno de los momentos más famosos de la historia de la liga es el desenlace de la que se disputó la temporada 1993/1994, que finalizó con el famoso penalti fallado por Djukic que le habría dado el título al Deportivo de La Coruña, y que se acabó celebrando en Barcelona en la que fue la cuarta liga consecutiva del ‘Dream Team’ de Cruyff. Al final el partido y con un Riazor desolado, un abatido Arsenio Iglesias se presentó en la rueda de prensa y soltó una de las frase que debería formar parte de cualquier compendio de filosofía que se precie: «Mucho que decir y poco que contar».

Han pasado 27 años desde ese episodio y, al acabar el esperpento protagonizado por el Barça en Vallecas, lo primero que me ha venido a la mente en la sentencia de o Bruxo de Arteixo; y es que cómo se puede explicar el delirante inicio de temporada del equipo blaugrana, que tras diez jornadas suma unos paupérrimos 15 puntos (la mitad de los posibles), producto de cuatro victorias, tres empates y tres derrotas, casualmente todas contra conjuntos madrileños, marcando unos ridículos 15 goles y encajando 11, destacando que en varios partidos el primer disparo entre tres palos ha acabado en las redes de la portería de Ter Stegen.

A la hora de buscar culpables seguro que la responsabilidad está compartida, empezando por la junta directiva, siguiendo por el cuerpo técnico y acabando por los jugadores, y dándole también su parte a los servicios médicos, a los que por la forma en la que están gestionando y tratando las lesiones habría que recordarles la máxima «si juegas a los médicos, hazlo sin pacientes reales», y a todos esos metemierdas que desde los medios de (des)información y desde las redes sociales pululan cerca del club y que son expertos en provocar incendios y en ofrecerse para apagarlos con gasolina.

Los antiguos romanos, que eran gente sabia y de buen razonar, decían que «el pescado se empieza a pudrir por la cabeza«. Y en el caso del Barça está claro que tanto el presidente Laporta como su antecesor Bartomeu, en unas ocasiones por acciones y en otras por omisión, tienen su cuota como máximos responsables de la institución; tampoco puede escapar de la quema un Koeman sobrepasado por los acontecimientos y que, como entrenador, está demostrando tener menos cintura que cuando era el último defensor en su etapa como jugador.

Pero en esta ocasión quiero dedicarle unas líneas a un cuarteto que lleva formando parte activa de los últimos estropicios que ha sufrido el FC Barcelona, que no son otros que sus cuatro actuales capitanes: Busquets, Piqué, Alba y Sergi Roberto. Y es que, por poner una fecha dolorosa en el recuerdo de los aficionados, los cuatro estuvieron en el vergonzante 3-0 de Roma y también acudieron puntuales a las sonrojantes citas europeas con el Liverpool (4-0), Bayern (2-8) Juventus (0-3), PSG (1-4) Bayern (0-3) y Benfica (3-0). Por el medio, también derrotas dolorosas en competiciones domésticas y una falta absoluta de nivel competitivo, tanto ante los grandes del fútbol español, como Real Madrid o Atleti, como últimamente ante sus nuevas bestias negras, como el Granada City, el Bayern de Cádiz, el Getafelsburgo o el Inter de Vallecas.

Resulta triste y preocupante comprobar que en la mayoría de las ocasiones en las que los cuatro capitanes están sobre el campo, el partido acaba en un funeral. Y es que Busquets no es capaz de llevar la manija de un equipo blandito, Piqué tiene otras prioridades que le ocupan mucho tiempo, Alba llevaba años viviendo de los caramelitos que le regalaba Messi y Sergi Roberto es un futbolista intrascendente con un juego más insulso que un bocadillo de miga de pan.

El problemas es que, cuando otros capitanes como Puyol, Xavi o Iniesta vieron que su momento había llegado y los tres pactaron una salida con honores del club de su vida, los actuales portadores del brazalete se han agarrado a sus contratos, cediendo únicamente en diferir la duración de los mismos para no perder ni un céntimo, y al poder que tienen en el vestuario para impedir la renovación a fondo que se debería practicar en la plantilla. Y con este comportamiento irresponsable, el aficionado culé seguirá asistiendo a un funeral tras otro mientras espera la resurrección de un equipo muerto y enterrado. @Bajarlalpasto1

El expediente a Piqué (y Busquets) y el equipo de ‘todo a Chen’

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Confieso que me gusta el asuntito de la apertura de expediente a Piqué y Busquets por parte de la Comisión Antiviolencia, a petición del llamado por mi amigo @vonmarius1899 «RCDE de los chinos«. Y digo que me gusta porque tengo curiosidad por saber la opinión de dicha Comisión antes las dos obviedades declaradas por los dos jugadores de Barça expedientados tras el partido de ida de Copa del Rey disputado frente al Espanyol en Cornellà (coño, he escrito Cornellà… ¡mira que si también me expedientan!).

Les recuerdo a los ignorantes, desmemoriados y metemierdas las declaraciones por las que una Comisión, que tendría que estar dedicada a estudiar y resolver asuntos graves y trascendentes, perderá el tiempo porque está obligada a atender las peticiones de un club mediocre y acomplejado que se avergüenza cuando le recuerdan dónde tienen su estadio y su domicilio social.

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«El Espanyol de Cornellà nos lo pone siempre difícil”, aseguró Piqué ante los medios, palabras que para el Consejo de Administración presidido por el señor Chen «flirtean muy peligrosamente con actitudes xenófobas y que, en todo caso, generan claramente violencia e intolerancia en torno a nuestro deporte”. Alucinante… porque ¿de dónde carallo es el Espanyol? ¿De verdad que hay que explicar eso? Ya sabemos que su máxima aspiración es ser considerados el filial principal del Real Madrid y a lo mejor les gustaría residir en Valdebebas, pero de momento tiene que compartir ese dudoso honor con Castilla, Getafe y algún otro equipo cuyo nombre prefiero dejarme olvidado en el teclado.

¿Y qué declaró Busquets que ofendió tanto a la autodenominada «maravillosa minoría»? Pues se atrevió a decir que “[el Espanyol] celebró en Cornellà como si hubieran pasado de ronda, pero las eliminatorias duran 180 minutos”. ¿Pero te has vuelto loco, Busquets? ¿Cómo que las eliminatorias de Copa son a ida y vuelta? ¿No ves que si fuesen a partido único el Barça estaría eliminado y jugarían las semifinales Madrid y Espanyol? ¿Y no sabes que este año en la Liga solo importa el ganador de las primeras partes?

Suena a chufla, ¿verdad? Pues no, porque para Chen y los suyos «las declaraciones de Busquets son totalmente contrarias a los valores de respeto en el fútbol y pueden ser generadoras de violencia e intolerancia”... ¡mi madriña, cómo están las cabezas de averiadas!

Por eso, volviendo al inicio del post, manifiesto que el asuntito me gusta. Y voy más allá. El Barça no debería salir a defender a sus jugadores y tendría que haber archivado en la papelera la comunicación de apertura del expediente. ¿Por qué? En principio para no participar de esa pamema. Y a continuación porque si la Comisión archiva el expediente, el club de una localidad cuyo nombre no me atrevo a escribir habrá protagonizado un ridículo de época; y si por el contrario se sancionase a los jugadores del Barça, nos podríamos tirar por el suelo de la risa leyendo los argumentos para justificar dicho desatino.

Por cierto, ¿se sabe qué Comisión, Comité, Observatorio o grupo de paniaguados investigará y sancionará a quienes en el estadio de Cornellà, llamado así principalmente por el simple detalle de que está en Cornellà, lanzaron objetos sobre un jugador, insultaron a otro, faltaron al respeto a una mujer e incluso en un alarde de valentía se atrevieron a meterse con un niño? Y después se ofenden por decirles que la cochiquera de Cornellá es el refugio de la maravillosa porquería. @Bajarlaalpasto

 

¿Por qué sale gratis lesionar a jugadores del Barça?

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Montaje fotográfico @wirlroly69

En la última jornada de LaLiga se estaba disputando el Alavés-FC Barcelona cuando, con el partido sentenciado en el marcador y a punto de finalizar, se produjo una entrada sobre un jugador culé que acabó con el futbolista en un quirófano despidiéndose de la temporada y con el autor de la infracción disculpándose en las redes sociales. La entrada de Theo Hernández, jugador del Alavés cedido por el Atlético de Madrid, no fue considerada ni falta por el árbitro Clos Gómez, limitándose a pitar saque de portería mientras Aleix Vidal se retorcía de dolor en el suelo.

Pero es que tres jornadas antes, jugando el Barça en Ipurúa frente al Eibar, un recadito de Escalante a Busquets delante de las narices del árbitro al poco tiempo de comenzar el partido acabó con el centrocampista azulgrana en los vestuarios, mientras el árbitro Sánchez Martínez se ponía de perfil ordenando «sigan, sigan».

Cómo no recordar también lo sucedido en la jornada 8 durante el Valencia-Barça. Entradón de Enzo a Iniesta – y no me vengan con la pamema de que «toca balón» – y, una vez más, la víctima se tuvo que retirar en camilla, mientras el infractor continuó sobre el campo repartiendo cera ante la complaciente mirada de Undiano Mallenco.

Tres jugadas, tres lesiones de jugadores del Barça y ni una tarjeta mostrada por los encargados de velar por el cumplimiento del reglamento. Pero es que en muchas ocasiones, desgraciadamente, los encargados de impartir justicia se convierten en cómplices necesarios para que los infractores puedan campar a sus anchas por los campos de fútbol, ya que se habrán chapado el reglamento y sabrán recitarlo como un papagayo, pero de fútbol, lo que es de fútbol, no tiene ni repajolera idea porque no han jugado ni a las chapas, con lo cual no saben aplicarlo.

Viendo el comportamiento de Clos, Sánchez y Undiano, conocidos ya como el trío corneta, es interesante hacer un poco de historia y recordar lo que sucedió en el Santiago Bernabéu en septiembre de 1969 durante un Real Madrid-FC Barcelona, arbitrado por Ortiz de Mendíbil, el colegiado de cámara del Madrid de la época. En el minuto 55 se produjo un entrada salvaje delante de las narices del árbitro del defensor madridista De Felipe a Bustillo, autor de dos goles en la primera parte, que acabó no solo con el partido del prometedor delantero culé,  sino prácticamente con su carrera profesional al ocasionarle la terrible triada. Y, ¡cómo no!, Ortiz de Mendíbil entonó el «sigan, sigan» dejando al pobre Bustillo tirado en el suelo con la rodilla destrozada, mientras el Real Madrid, obedeciendo al colegiado, continuó jugando como si nada.

En este vídeo subido por Joaquim Molins @qmolins, socio e historiador del FC Barcelona, se puede ver la secuencia entera de la jugada y debajo el comentario del propio Molins:

 

«En el Bernabeu temporada 69-70, Pedro de Felipe entra violentamente al delantero azulgrana Bustillo, causándole la terrible triada, y el árbitro Ortiz de Mendíbil ni pita falta. El Madrid no tira la pelota fuera y continua atacando. El Barcelona echa la pelota fuera para que se atienda a Bustillo, y al reanudar el juego no la devuelven.»

Finalizo con el título del post: Lesionar a jugadores del Barça sale gratis… y me pregunto por qué. Una jugada puede ser mala suerte, dos casualidad, ¿pero tres entre la jornada 8 y la 22? ¿Y las tres jugadas lejos del Camp Nou? Muchos aficionados hablan de impunidad, de cacería, de permisividad… y otros aseguran que el trabajo de la caverna está dando sus frutos. Sirva como muestra este tuit vomitivo de uno de sus máximos representantes:

tuit_roncero

Las pruebas de Del Bosque

mundial 2010El último partido amistoso jugado por la selección española en Qatar ha servido para comprobar que el seleccionador apuesta por dar continuidad al equipo que ha conseguidos los grandes éxitos de nuestro futbol, y que, salvo lesiones, el bloque que defenderá el título de campeón del mundo en Brasil (dando por hecho que conseguirá la clasificación) será el mismo que levantó la última Eurocopa.

En la portería Casillas sigue siendo el portero titular, con Valdés y Reina como lugartenientes, con el joven De Gea a la expectativa  por si fallase alguno de los favoritos para el puesto. La gracieta de Mourinho de enviar a Iker al banquillo no tendrá ninguna incidencia, ya que se ha demostrado que no es más que la demostración de lo ruin que puede ser un entrenador cuando siente celos del buque-insignia del club para el que trabaja.

En defensa, y dependiendo del estado físico de Puyol, no habrá variaciones, y así la preferida por Don Vicente es Ramos, Puyol, Piqué y Alba. Pero como el central del Barça, por motivos de la edad, necesita dosificarse, habrá que buscar un lateral derecho de garantías, ya que Ramos pasaría a jugar en el centro de la defensa. Ese puesto está muy abierto, ya que la lista de candidatos la forman Arbeloa, Azpilicueta, Iraola y Juanfran, sin descartar a Montoya. Para el otro lateral hay que contar con Monreal, por lo que quedaría por cubrir una plaza de central, que bien podría ocupar el polivalente Javi Martínez.

El jugador favorito del seleccionador, Busquets, llevará el timón del centro del campo acompañado, en principio, por Xabi Alonso; pero para ese puesto no se puede descartar a Javi Martínez ni a Mario Suárez. A su lado, Xavi e Iniesta son insustituibles, quedando Cazorla y Silva  como principales recambios, pero sin perder de vista la evolución de Isco, Thiago y Beñat, quienes intentarán hacer méritos para hacerse con un hueco entre los elegidos.

En punta de ataque habrá que ver por qué sistema se decanta el mister. Si, como parece indicar, opta por seguir jugando con falso nueve, Pedro, Villa y Cesc serán fijos, con muchas papeletas para incluir a Mata. Pero como seguro que también llevará a un nueve puro, esa plaza se la disputarán Soldado, Torres, Negredo y Llorente.

Habrá que estar atentos a las próximas convocatorias en las que se jugarán importantes partidos clasificatorios para la fase final del mundial, para comprobar si se cumplen nuestras previsiones.

El Barça de los once canteranos

En las últimas temporadas hubo varias oportunidades para que el Barça presentase sobre el terreno de juego un equipo formado íntegramente por futbolistas educados futbolísticamente en La Masía. Pero ha sido este último domingo cuando por espacio de una hora Valdés, Montoya, Piqué, Puyol, Alba, Xavi, Busquets, Iniesta, Cesc, Pedro y Messi, con Tito Vilanova en el banquillo, demostraron que el trabajo iniciado hace muchos años por Johan Cruyff no era la locura de un romántico del fútbol. Uno de los momentos más destacados de este trabajo ya fue cuando en el 2010 los jugadores del Barça arrasaron en la gala del Balón de Oro, consiguiendo Messi el de Oro, Iniesta el de Plata y Xavi el de Bronce.

Incluso un técnico como Van Gaal, coleccionista de filias y fobias a partes iguales, pronosticó cuando entrenaba al equipo azulgrana que un equipo formado por canteranos acabaría ganando la Champions League. Pues bien, a día de hoy, a nadie le extrañaría que el once mencionado anteriormente se presentase en Wembley en el mes de mayo con todas las garantías de alzar la orejona.

Tampoco, en el colmo de un purismo mal entendido, se pedirá que grandes futbolistas como Alves, Mascherano, Adriano, Song, Villa o Alexis desaparezcan de las alineaciones; pero sí que parece claro que un jugador que llegue de fuera tendrá que adaptarse y reciclarse para poder jugar en un equipo que está convencido de a lo que juega, y que están dispuestos a ir con esa idea hasta las últimas consecuencias.

Como de la cantera culé todos los años salen muchos y muy buenos jugadores, es cierto que alguno de ellos tuvo que buscarse la vida futbolística lejos del Camp Nou; y así, Piqué en el Manchester United, Cesc en el Arsenal y  Alba en el Valencia, demostraron con el paso del tiempo que tenían ADN Barça, y por ello el empeño por parte de los dirigentes y técnicos en traerlos, pagando cantidades importantes, para la que, sin duda, siempre fue su casa.

Sería injusto olvidarse del presidente Laporta, al que se le podrán criticar muchas de sus actuaciones en el campo político o en su vida personal, pero que durante su mandato apostó, enfrentándose incluso a algún gurú del barcelonismo, primero por Rijkaard y después por Guardiola, como entrenadores que apostaban por un tipo de fútbol que solo puede ser ejecutado por jugadores educados desde pequeños en esa filosofía de juego, y que han demostrado que el modelo es válido y funciona.

En el once que jugó contra el Levante participaron nueve jugadores que formaron parte de la selección española campeona de la última Eurocopa (seis de ellos también jugaron de titulares en la final de la Copa del Mundo), otro que ya posee tres Balones de Oro y Montoya, lateral derecho que ya ha sido convocado por Vicente Del Bosque para jugar con la absoluta. A ellos hay que unir a Thiago (un fijo ya en el primer equipo), Bartra, Tello o Cuenca quienes ya han llegado a jugar, incluso, partidos importantes de Champions League.

Y tan importante como este hecho, es que el futuro del modelo está asegurado, ya que muchos de esos futbolistas todavía tienen por delante varias temporadas al máximo rendimiento, y por detrás hay otros jóvenes que ya están llamando a las puertas del primer equipo y que ya han llegado a debutar, como Dos Santos, Sergi Roberto o Deulofeu, y otros que seguirán trabajando en el equipo filial hasta que llegue el momento de engrosar la primer plantilla, como Oier, Planas, Rafinha, Grimaldo, Espinosa o Dongou.

Enhorabuena a todos los técnicos y entrenadores, tanto de la primera plantilla como de las categorías inferiores, del F.C. Barcelona porque ellos han sido los culpables de haber creado un estilo de fútbol admirado en todo el mundo.

Balón de Oro: no hay debate

El titular de este post seguramente lo podamos utilizar para las próximas temporadas porque si Messi consigue mantener su nivel actual de excelencia, en los próximos años seguirá recibiendo el Balón de Oro. El motivo principal es que, por suerte para el espectáculo futbolístico, el Balón de Oro se decide por los méritos que los jugadores hacen sobre el césped, y no por andar gimoteando por las ruedas de prensa mendigando premios para algún futbolista al que, sin restarle ni un ápice de sus cualidades como atleta, está a años luz del astro argentino del Barça.

Por eso, y como hay que cumplir con el trámite de las votaciones, la UEFA publica una lista con los 23 candidatos, que bien se podría titular Messi y los 22 palmeros. Es más, la única emoción de esta votación está en saber quienes serán los galardonados con el Balón de Plata y el Balón de Bronce. 

En una temporada normal, Iniesta y Casillas, como líderes de la selección española que triunfó en la Eurocopa, podrán estar en condiciones de disputarle a la pulga el máximo galardón; pero es que este año los números de Messi no dejan lugar a dudas, por lo que cualquier debate que se genere no pasará de ser un mero entretenimiento para discutir sobre fútbol tomando cañas en las barras de los bares o alentando alguna polémica a través de las redes sociales.

Analizando la lista llama la atención que, además de tres porteros (Casillas, Neuer y Buffon), sólo aparecen dos defensas centrales (Piqué y Ramos); otros candidatos para ocupar estos puestos serían Hummels, Thiago Silva y David Luiz. Y destaca la ausencia de laterales de ambas bandas, a la espera de que exploten jugadores jóvenes en esas demarcaciones como Alaba, Van der Wiel o Jordi Alba. 

En el centro del campo nos encontramos con el cuarteto titular de la selección española (Alonso, Busquets, Xavi e Iniesta), acompañados por Pirlo, Touré y Özil, y se echa de menos a otros dos españoles, como Silva y Cesc. 

La lista la completan once delanteros de campanillas, ya que cualquiera de ellos sería titular indiscutible en cualquier equipo del mundo: Agüero, Balotelli, Benzema, Drogba, Falcao, Ibra, Messi, Neymar, Ronaldo, Rooney y Van Persie. Quizás el díscolo Balotelli y un Benzema que no acaba de conseguir la titularidad en su club y que pasó de puntillas por la Eurocopa, desentonen dentro del nivel impresionante que atesoran el resto de killers del fútbol mundial. 

Un dato relevante es que en el amplio elenco de goleadores no figura ningún delantero español, así es que habrá que desear que vengan tiempos mejores para nuestros Llorente, Soldado, Pedro, Torres o Villa. 

Destaca que sólo Neymar juega fuera de Europa y que la liga española aporta la mitad de los candidatos, entre ellos siete jugadores nacionales, con muchas posibilidades de conseguir alguno de los galardones en juego. Y, repasando la lista, se desprende que el primero trofeo ya se lo han entregado a la Masía, academia de las categorías inferiores del F.C. Barcelona, de donde han salido nada más y nada menos que cinco de los nominados. 

Como en Bajarla al pasto nos gusta mojarnos, nuestra apuesta es Messi (Balón de Oro), Iniesta (Balón de Plata) y Cristiano Ronaldo (Balón de Bronce). Y como posibles sorpresas, apuntamos los nombres de Casillas y Falcao. ¿Quiénes son vuestros favoritos?